
Verlo volar és un espectáculo inolvidable..., ver moverse en el aire a una criatura de tan gran tamaño, con una gracia felina es algo que se te queda grabado en la mente y aflora cuando te reunes con tus nietos y le cuentas antiguas historias.
Jamás me crucé con uno, ni tampoco lo deseo, pues su fuerza es inmensa y su fiereza no tiene parangón, pero no si no se le molesta, el grifo pasará de largo y no te hará ningún daño. Pues tan sólo desea no ser molestado... que lo dejen en paz... que lo dejen volar...
Incluso antiguas leyendas dicen que sirvieron de montura a paladines y caballeros, y que ellos y sólo ellos, hombres de enorme bondad y lealtad eran capaces de entenderlas y comprenderlas, y les concedían el honor de servirles de montura.
Ahh que increíble compañera de aventuras, que aliado tan valioso para combatir al lado de los más valentes. Pero, no te equivoques, el grifo será siempre el que te elija a ti y no tú al grifo, si intentas invertir el orden de la naturaleza, acabarás pagando sus conseguencias, y te aseguro, que no tendrá ningún problema en acabar contigo en segundos.
Mejor verlos volar desde abajo, admirar la envergadura de sus alas, y seguir soñando..., soñando que algún día... el grifo vuelva a elegir, puedas admirar la fantasía, desde el cielo...
Namarië
si, es un bicho, criatura, monstruo, animal, o como quieras llamarlo bonito. Pero, ¿te imaginas un bicho de esos volando por encima tuya y que de repente le diera un apretón? No me gustaría ni imaginármelo. En estos momentos de delirio somnoliento, prefiero a las típicas palomas.
ResponderEliminarPero me gustaría montar en uno, aunque fuera soñando.Y mis sueños son un poco raros, te lo aseguro
jajajaja mejor no imaginarmelo encima mio, y menos con un apretón. Pero te aseguro que montarlo debe de ser increible...
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