martes, 2 de diciembre de 2008

Agitando la varita...


Realizar un movimieto tan sencillo, a veces puede resultar devastador... la magia, como todas la cosas, está sujeta a unas condiciones, unas reglas las cuales se deben cumplir a rajatabla pues el más mínimo error puede resultar fatal.
Cetros, varitas mágicas almacenadoras de conjuros que ayudan al mago a ejecutar su sortilegio más rápidamente. La varita siempre ha estado unida al mago y al hechicero... en un romance que perdura durante eones de tiempo, y que jamás se romperá, pues se necesitan el uno al otro y se atraen como dos polos opuestos.
Hadas y brujas también heredaron este simple instrumento, y que sirver como canalizador de energía arcana y que hace que ciertos hechiceros se sientan perdidos sin su compañía...
Un leve movimiento de la mano, un simple agitar de energía y la magia se canaliza a traves de la varita con mágico destino y final fatal o feliz...según el encantamiento.
¿Alguien concibe un hada sin su varita mágica?, la respuesta es tan evidente que se responde por si sola, la necesitan lo suficiente como para no encantar a Cenicienta sin ella, pues creo que si pudiera elegir, se quedaría en casa limpiando sin conocer a su principe si el hada madrina no lanzaba el hechizo que la convertirá en princesa durante unas horas, con su varita mágica...

1 comentario:

  1. Creo que una cenicienta no se quedaría en casa limpiando sin su hada madrina.
    Pero es cierto, no concebimos un hada sin una barita, ni una "cenicienta" con iniciativa o picardía.

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